Estimados, esta es una historia que rescató mi madre, no se de donde, proveniente del año 2002. Tenia 17 años. 4to año. No se si era un borrador para el colegio o por placer. Cuestión que acá esta.
Intitulada "Historias insólitas - Fascículo primero".
Un matrimonio jóven acababa de tener su primer hijo. Era la pareja Grigmmingthon. Lamentablemente su hijo Carlitos padecía una rara enfermedad, la que le permitiría continuar viviendo tan sólo cinco años más, de no realizarse un transplante de pulmón. Para esto se necesitarían dos donantes de grupo sanguíneo parecido, y en lo posible familiares. Obviamente todo esto apuntaba a sus padres, quienes orgullosos de su hijo Carlitos, estaban totalmente dispuestos a arriesgar su vida para salvar la de su hijo. Como la operación no tenía apuro, y recomendaban ser llevada a cabo entre los cuatro y cinco años de edad del niño, los años pasaron.
No se sabe bien por qué; si habrá sido su forma de comportarse con ella o su cara de nabo o un mambo, pero la señora cambió de parecer. Ya no estaba muy segura del asunto. Con las dudas y preocupaciones de su madre, el niño ya consciente y enterado de la situación, decidió matarla para asegurarse medio pulmón. Esto ocurrió cuando ya había recibido parte del pulmón izquierdo de su padre, y mientras esperaba recibir la mitad del derecho de su madre. Aunque ahora estaban disponibles dos pulmones de la donante, por razones de cavidad debido a la edad no lo fueron necesarios. Las operaciones habían sido un éxito. No obstante al volver el donante masculino en sí, y al enterarse de la trágica tragedia, no dudo ni dos segundos en asesinar a la pobre criatura. Muy furioso míster nosecuanto reclamó el regreso de su medio pulmón. ¡Para colmo los boludos del hospital se equivocaron y le dieron el medio de su mujer! Sin remedio el tipo se las tuvo que bancar ya que los cirujanos ya tenían las bolas llenas con todo esto, y habían tirado todo a la mierda. ¡Pero no faltaba más! Al recibir un diagnóstico de su difunto hijo, don Carlos notó sorprendido que Carlitos Jr no había tenido un carajo de enfermedad. Esto le pasó al amigo del amigo de un amigo. Dicen, ¿no? Hay amigos que matan.
Luis María
